–“Que las chicas vivan bien y se salven” es una frase que inspira cada acción apostólica, el lograr formar a la joven a nivel integral y que esto favorezca un bienestar personal en su presente actual es sin duda el ideal de mi ser.-
«Nada detiene al que ama a Cristo». Esta es una certeza en mi vida, la cual sostiene mi vida y vocación. Como religiosa de María Inmaculada acompañamos a las personas con dirección espiritual, y les ofrecemos los ejercicios espirituales Ignacianos que son parte de nuestra espiritualidad.
El haber sido llamada desde joven a la congregación, me hace reflexionar que a través de ella me he salvado; ademas de hacer muy mías las palabras del profeta Jeremías: «Desde el vientre de tu madre te llamé, para ser profeta de las naciones te consagré».